lunes, 18 de abril de 2011

Elecciones 2011: Asturias o el baile de Cascos

Firma invitada: Rubén Fernández (periodista; @rubenfdez)

“Si me sacan a bailar, acepto”, con esta frase pronunciada en una entrevista en 2009 con la revista Época, Francisco Álvarez Cascos (Madrid, 1947) anunciaba su disposición a encabezar el cartel electoral del PP asturiano en las autonómicas de 2011.  Cinco años antes, el 21 de enero del 2004, anunciaba por sorpresa que dejaba la política “por motivos personales”. Pocos le creyeron. Sabían que tarde o temprano volvería y que lo haría en la tierra en la que se crió. Los que le conocen sabían que este animal político llevaba años intentando ser el Fraga asturiano. Por eso durante su etapa como vicepresidente primero y ministro de Fomento después,  los guiños a su comunidad autónoma eran habituales, adornaba sus discursos con citas y referencias a ilustrados como Jovellanos o viajaba con delegación de poderes de Aznar para no coincidir con los líderes regionales cuando presidía una inauguración. Pero sobretodo se encargaba de mantener viva una corriente interna dentro del Partido Popular asturiano: los casquistas. 

Francisco Álvarez-Cascos
Al final se cumplió las predicciones y 6 años después Cascos volvió a la política, pero no todo fue como esperaba.  Mantuvo un duro pulso con la dirección del Partido Popular asturiano que acabó por perder. Pero Álvarez-Cascos no se rindió y fundó Foro Asturias de los Ciudadanos (FAC). La decisión no solo dinamitó el centro-derecha asturiano sino todo el panorama político. Estas elecciones pivotan sobre el éxito o el fracaso de su formación. De momento cuenta con más aciertos. En menos de 3 meses su partido político ha conseguido presentar candidaturas en 68 de los 78 concejos y ya cuenta con 8.469 afiliados (el último partido de reciente creación que ha aparecido en el panorama político español, UPyD, que dio la sorpresa en las generales de 2008 al conseguir un acta de diputado en el Parlamento no contaba con 2.000 afiliados en ese momento). Los estudios demoscópicos, de momento, han venido a confirmar el éxito de Foro. Las dos únicas encuestas son de principios de año, publicadas en el Diario “El Comercio” y en “El Mundo”. Ambas se producían en caliente, a los pocos días de que Cascos diese el portazo al Partido Popular y daban una mayoría relativa a FAC. 

En estos tres meses Cascos ha construido un partido ambiguo en lo ideológico –huye de las etiquetas y con frecuencia cita a políticos de izquierdas en sus mítines- y pese a que él lleva 35 años en la cosa pública, su partido no se cansa de hablar de regeneración. Quizás por eso los puestos claves, como la secretaría general, están en manos de advenedizos en política pero con una exitosa carrera en una profesión liberal. Los principales candidatos locales a las 3 ciudades asturianas tampoco cuentan con experiencia previa. En Gijón han designado a Carmen Moriyón, una exitosa oncóloga y jefa del servicio de Cáncer de Mama en el Hospital de Cabueñes. En Oviedo el candidato es  Arturo González de Mesa, un abogado, y en Avilés han puesto a un joven profesor universitario llamado Pablo Sánchez Lorza. 

Isabel Pérez-Espinosa
Mientras Cascos llena el aforo de sus actos, la candidata popular, Isabel Pérez-Espinosa (Gijón, 1967), tiene que conformarse con mítines mucho más humildes. No lo tiene fácil esta joven abogada, que ve como muchos le identifican como la marioneta política de su mentor, el alcalde de Oviedo Gabino de Lorenzo, considerado auténtico poder en la sombra en el Partido Popular asturiano por muchos. No en vano fue uno de los más firmes opositores que encontró Cascos a su regreso y quien decidió poner como candidata a su mano derecha en el consistorio. Pérez-Espinosa pertenece a esa nueva generación de políticas como Alicia Sánchez Camacho o María Dolores de Cospedal. Además de compartir sexo y generación, las tres se han caracterizado por ser madres solteras. Pretende ser la cara de renovación en el PP pero FAC le puede aguar la fiesta y convertirla en la tercera fuerza política en la Junta General (nombre que recibe el Parlamento asturiano) como predicen las encuestas. Un fiasco en toda regla. La marcha de Cascos y sus acólitos no ha sido la única. Hace unos años  abandonó el partido el ex portavoz popular en la Junta, Juan Morales, que ahora concurre bajo la recién creada marca IDEAS (Independientes de Asturias) lo cuál puede contribuir, aún más, a la división del voto del centro-derecha. Por estos motivos no es extraño que a la hora de confeccionar las listas hubiese codazos en el PP. Nunca los puestos de salida han estado tan codiciados. Al final hay muchas novedades, pero los que tienen más probabilidades de salir son miembros del actual aparato del PP regional y que ya están en la Junta.

No son pocos los que comparan la situación del PP en Asturias con la de Navarra, donde UPN es el principal partido de derechas y el PP concurrirá como marca diferenciada. El 22-M puede que les dé la razón. Con su decisión , Rajoy ha arriesgado y mucho. Convertirse en la tercera fuerza política sería un desastre sin paliativos porque el Parlamento de Asturias se uniría al de Canarias, Cataluña, País Vasco y Navarra donde el PP no es alternativa de gobierno, solo un partido más de oposición y eso ,para un partido que aspira a gobernar España en menos de un año, es una malísima noticia. 

Pero las aguas no solo están revueltas en el centro-derecha. A Izquierda Unida, que cuenta con cuatro parlamentarios y es socio de gobierno, tampoco le van bien las cosas. Por un lado la crisis entre la dirección de Izquierda Unida y el Partido Comunista de Asturias se ha agravado y los segundos ya han anunciado que se presentarán bajo la marca “Frente de Izquierdas” a las autonómicas y en diversos municipios, entre ellos el principal granero de votos de IU: Mieres. Por si esto fuera poco, también se ha roto la alianza con el partido con el que concurrieron a las últimas autonómicas, Bloque por Asturies, que cuenta con un diputado, actualmente en el grupo mixto. El Bloque, un partido nacionalista, acudirá en esta ocasión de la mano de UNA (Unidá Nacionaliega Asturiana). Cuentan con pocas posibilidades de conseguir un escaño. 

Javier Fernández
Con este panorama, no es extraño que el candidato socialista, Javier Fernández (Mieres, 1948), se presente como el candidato del partido “serio”. Lo repite en cada mitin igual que de manera machacona habla del riesgo que corre Asturias de caer en manos “de las derechas”, lo que sería un pacto de gobierno entre FAC y el PP. Sabe que su principal rival es Álvarez-Cascos y por eso le lanza sus principales dardos. Fernández concurre por primera vez como cabeza de cartel. Sucede a Vicente Álvarez Areces, que lleva en el poder desde 1999. Carece del carisma y de la empatía con el electorado que tiene su antecesor, pero es muy apreciado entre las bases socialistas a las que conoce bien, ya que lleva desde el 2000 siendo secretario general de la Federación Socialista asturiana. Durante estos años ha conseguido pacificar el partido y aunar a las diferentes familias, en especial al sindicato minero SOMA-FIA-UGT que en los últimos años se había erigido como un lobby de presión dentro del propio aparato. Hasta hace unos meses, su único problema era el desgaste del gobierno. El PSOE lleva 12 años interrumpidos en el poder y ha presidido la comunidad desde 1983, a excepción del paréntesis entre 1995-1999. Durante estos años el crecimiento de la comunidad autónoma se ha situado por debajo de la media nacional, ya sea en épocas de bonanza o de crisis. La sensación que tienen muchos asturianos es que la comunidad lleva años estancada y que no ha encontrado una salida digna a las duras reconversiones industriales de los 80. Durante los dos últimos años la desaceleración también se ha dejado notar. Así, en 2009 la caída del PIB fue de un 3,95, por encima de la media nacional (3,83). 

El desgaste producido por la acción de gobierno ya empezaba a quedar patente en las últimas autonómicas, cuando el PSOE se quedó un solo un escaño por encima del PP (21 frente a 20) y no ha hecho más que agudizarse durante esta última legislatura. Por si fuera poco, el pasado 25 de enero estallaba un escándalo político que ha salpicado de lleno al gobierno. En una operación policial era detenido el que hasta el pasado mes de agosto era el consejero de Educación del Principado, José Luis Iglesias Riopedre, así como su mano derecha, dos empresarios y una funcionaria, acusados de tejer una compleja red de contratos irregulares y desvíos de fondos. La 'Operación Marea', como así se llama, ha puesto en el centro de mira los contratos que realiza el gobierno. La imagen de policías acudiendo a las consejerías ha dañado a un ejecutivo que con frecuencia se pavoneaba de su transparencia, en contraste con otros escándalos que, como el caso 'Gürtel', han afectado de lleno al PP. Riopedre, acusado de delitos de prevaricación, cohecho, malversación de fondos públicos, fraude y tráfico de influencias, pasó 45 días en prisión y fue liberado bajo fianza después de pagar 100.000 euros. Las investigaciones siguen su curso.

Desde un primer momento, la reacción de Javier Fernández fue contundente, algo que contrastó con la incredulidad con la que Areces acogió la noticia. La mayor severidad que suele aplicar el electorado progresista a los casos de corrupción de sus políticos ha expandido el miedo entre las filas socialistas, que temen una fuga de votantes que haga subir la abstención o, incluso, prueben a votar al partido de Cascos. A estas alturas la máxima aspiración del PSOE es salvar los muebles, poder reeditar el pacto de izquierdas con IU y hacer un nuevo gobierno de coalición, presidido esta vez por Javier Fernández.

Además de PSOE, PP, IU y FAC, hay otros partidos, como UPyD, que pretenden entrar en la Junta General y otros, como la coalición asturianista URAS-PAS, que aspiran a volver. No lo tienen fácil. Nunca la oferta ha sido tan amplia, en una comunidad en la que suele haber tres o cuatro partidos representados. Además, el sistema electoral tiene varias peculariedades. Para entrar en la Junta General hay que tener un 5% de los votos, una exigencia más alta que en otras comunidades como Cataluña, donde basta con un 3%. Además, y pese a ser una comunidad uniprovincial,  Asturias está dividida en tres circunscripciones (Oriente , Occidente y Centro), siendo la central la más importante, ya que cuenta con 32 escaños de los 45 que conforman el Parlamento asturiano.

La nueva Junta General tendrá que hacer frente a diversos retos como endurecer la economía, intentar cambiar un ciclo económico que se tercia estancado o dar una salida definitiva al sector de la minería, ahora que la Unión Europea amenaza con acabar las ayudas. Aunque no todo son retos. El nuevo parlamento que salga de esta legislatura también asistirá a la llegada de la alta velocidad a Asturias, prevista para 2013, pero, sobre todo, podrá acceder a parte del control de la joya de la corona: Cajastur. La entidad asturiana ha iniciado una dulce expansión. Ha absorbido CCM, que ahora es un banco y que le pertenece como filial. Además, ha iniciado una fusión fría que dará lugar a Banco Base junto con Caja Extremadura y Caja Cantabria. Con lo cuál la decisión de los asturianos puede afectar a terceros.

Ahora todo está en manos de una coreografía individual. Habrá codazos y pisotones. Con toda probabilidad, a partir del 22-M tendrán que formarse parejas para danzar. Será complicado, pero nadie dijo que bailar fuese fácil. 


lunes, 11 de abril de 2011

"El problema no era Zapatero; el problema es la situación. Y ésta no ha cambiado"

ENTREVISTA A ALBERT MEDRÁN, consultor de comunicación

Licenciado en Ciencias Políticas por la Universitat Pompeu Fabra, Postgrado y Master en Comunicación Política de la UAB-ICPS, Albert Medrán es consultor de comunicación, especializado en comunicación online y política. Su blog personal, E-Campanya, ha sido varias veces premiado y está considerado uno de los mejores blogs políticos de España. En esta entrevista, desgrana con su ojo de experto la actualidad política española, ahora monopolizada por las elecciones del 22 de mayo y por el reciente anuncio hecho por el presidente Zapatero de no presentarse a un tercer mandato.

P: Empecemos haciendo un ejercicio de imaginación y futurología: viajamos en el tiempo hasta la noche del próximo 22 de mayo. ¿Cuál cree Albert Medrán que será el titular dejado por la jornada electoral?

R: Aunque no soy bueno titulando, ya que mi trabajo poco tiene que ver con el periodismo, imagino que será algo así como "España da la espalda a Zapatero", ilustrando la victoria del PP que, por otra parte, no sé hasta qué punto va a ser incontestable.

P: Le veo un poco escéptico respecto al ambiente que se respira de que el PP va a arrasar en esas elecciones. Tradicionalmente en las municipales la cosa ha solido estar bastante ajustada y las encuestas apuntan a que esta vez sí puede haber una victoria sin paliativos por parte del PP. ¿Recela de esta idea? ¿Cree que al final la victoria no será tan aplastante?

R: No lo tengo claro. Quizá en las autonómicas sí se note más, pero en las municipales al final estás evaluando lo que hace tu alcalde, lo que vives y al final quien lleva 30 años en el ayuntamiento no va a dejar de ser votado por  una lectura nacional del electorado. Es por eso por lo que creo que la distancia no será enorme, aunque el clima político que estamos viviendo es lo suficientemente complejo como para dejarlo todo en modo incógnita. Los ejercicios de futurología en esta ocasión son muy complicados.

P: Entremos a valorar el anuncio de Zapatero del pasado 2 de abril, cuando confirmó que no optaría a un tercer mandato. ¿Qué le pareció la puesta en escena y el momento elegido por el presidente?

R: Creo que fue una buena manera de presentarlo, sobre todo para su partido. Quizá otros líderes lo hubieran hecho desde La Moncloa o en un microfonazo ante periodistas, e incluso quizá hubieran jugado más con la incógnita. Dicho esto, y dentro del marco que se había fijado (filtración de una fecha, ambiente caldeado...) es la mejor salida posible porque tuvo a toda la opinión pública y a todos los medios de comunicación pendientes, por lo que pudo colocar sus mensajes clave antes del momento que todos estaban esperando y hacerlo en un contexto que no se percibe ni como derrotista ni solitario, que contrasta mucho con otros momentos que ha tenido el presidente. Eso está bien pero tampoco sé hasta qué punto eso va a ayudar a lo que se pretendía evitar: que el debate sucesorio se mezclara con la campaña electoral, al hacerlo en la misma sede y con candidatos detrás. Eso es lo que no acabo de tener claro. 

P: Osea, que no estás seguro de que el anuncio vaya a beneficiar electoralmente al PSOE el 22 de mayo.

R: Hombre, la incógnita se ha despejado y esto permite que el debate se centre más en lo que tiene que ser. Los candidatos han respirado tranquilos y han soltado lastre pero también digo que no creo que el hecho de que se vaya dé inmediatamente fuerza al PSOE. Y no lo creo porque el problema no era Zapatero, el problema es la situación: hay un partido que gobierna, una grave crisis en España y todos tendemos a culpar al partido que gobierna. Y esto no desaparece porque se vaya el líder. Siguen gobernando y siguen teniendo responsabilidad por lo ocurrido, aunque tampoco sea tan grande como algunos creen.

P: ¿Cómo cree que va a influir este asunto en la campaña electoral? La respuesta del PP al anuncio ha sido el pedir que la retirada sea completa e inmediata, adelantando las elecciones generales. ¿Considera que aciertan al ir por este camino?

R: Al PP le conviene hacer esa lectura nacional en campaña y al PSOE le conviene no hacerlo, igual que pasó en 1995. Y esas son las dos estrategias que estamos viendo. Yo creo que, gracias al anuncio, el Partido Socialista va a poder salvar los muebles en muchos lugares. Es acertado no asociarse a una marca personal que lo que ahora supone es un lastre, como la de Zapatero. Respecto a si al PP le conviene seguir forzando esos mensajes hasta el último día, creo que no. A medida que se acerque el día de las elecciones deben ir bajando la intensidad. Hay sitios donde esa lectura nacional les puede eclipsar los programas y las propuestas que presentan, que al final es lo que se evalúa. Pero yo creo que de momento los dos están jugando bien sus cartas.

Albert Medrán (d), en un momento de la entrevista con @davidmartinezg | @Maria_valde

P: Además de que no se presenta, Zapatero dejó claro el 2 de abril que agotará la legislatura. ¿Puede haber en esto marcha atrás? ¿Qué tendría que pasar el 22-M para que el presidente reconsiderara su postura y adelantara las elecciones?

R: En dos semanas tendrá lugar el 80º aniversario de la II República, un régimen que se instauró precisamente tras unas elecciones municipales. Su papel es importante. Sin embargo, tengo claro que la decisión de adelantar o no las elecciones no va a venir marcada por el 22-M. Por una sencilla razón: finales de mayo, tiempo de análisis de resultados, con el horizonte de unas primarias en el PSOE, sin candidato aún... Esto exige unos tiempos y ahora, por muy mal que le vaya en las elecciones, no lo hay. No puede adelantar unas elecciones cuando el Partido Socialista no está preparado. Cuando lo esté, cuando ya tengan candidato y las cosas claras, puede ser que fuercen la máquina, pero no motivados por los resultados electorales.

P: Tocando ya el tema de las primarias en el PSOE, hemos visto que José Bono ha tenido un papel muy protagonista en el anuncio de Zapatero de no volver a presentarse. Este hecho, unido a que ya en 2000 intentó ser el líder del partido, hace que muchos le vean como el tapado de esas primarias. ¿Comparte usted esta visión?

R: Yo creo que Bono es un poco como el bigote de Aznar, que parece que no está pero está. Y siempre ha sido así en la 'etapa Zapatero'. Venía de perder contra todo pronóstico el Congreso que encumbró al actual presidente, apareció en su primer Ejecutivo cuando nadie lo esperaba, desapareció, volvió a aparecer como presidente del Congreso... Es una figura muy importante en el PSOE y juega un papel relevante en la política nacional. Sobre si es el tapado, ni lo sé ni me aventuro a decir nada pero si algo hay que tener claro es que Bono ha querido ser presidente de este país, ése ha sido su objetivo político en la vida.

P: Sí parece claro que se presentarán a esas primarias Alfredo Pérez Rubalcaba y Carme Chacón. ¿Cree que estas serán las únicas candidaturas o que surgirán nuevas alternativas?

R: Históricamente, el PSOE no ha tenido dos corrientes, ha tenido más. Yo no descartaría a priori más de dos candidatos. Otra cosa es lo que se consiga hacer este mes y sobre todo cómo influirán los resultados de las elecciones, que aquí sí creo que van a tener gran importancia. Si salen de los comicios con un resultado decente, pueden afrontar un escenario de más de dos candidatos. Si la derrota es absoluta, no sé hasta qué punto podrán meterse en ese ambiente de tanta inestabilidad.

P: ¿Quién crees que puede ser el mejor candidato para el PSOE?

R: El mejor a nivel demoscópico es Rubalcaba. Tiene mejor valoración que Rajoy, es mejor que Rajoy en campaña, es respetado dentro del partido, es perro viejo... El punto negativo lo tiene en la edad y en su vinculación al felipismo, pero aún así, y también pese al 'caso Faisán', es buen candidato. 

P: Haciendo la metáfora de ver la política como la Liga de fútbol, el PP le sacaría unos 14 puntos al PSOE. ¿Cuántos quedan por jugarse? ¿Son suficientes para que el PSOE pueda remontar?

R: Ya en 2004 le dieron la vuelta al resultado. Las encuestas ahora dicen lo que dicen pero queda mucho tiempo y está la incógnita de ver quién es el candidato, de ver si el electorado no adscrito se complace ya con la marcha de Zapatero y, sobre todo, está el hecho de que el PP no tiene buen candidato. La valoración de Rajoy es muy mala y si las primarias salen bien, con un líder mejor valorado que Rajoy, si lo hacen bien a nivel de comunicación y de propuestas, dando imagen de que realmente pueden hacer algo, la remontada no es descartable, aunque sea poco probable. Ahora el PP lo tiene muy bien pero el viento puede cambiar y eso no se controla. Además, creo que no se han preparado para ganar las elecciones de 2012. Están aprovechando la inercia pero Rajoy no se está preparando para ganar. Se está acercando a sus terceros comicios, a los definitivos, y no tiene relato personal. Sí lo tenía, por ejemplo, Artur Mas. Se le veía que había pasado por la travesía y que ya le tocaba. Esto Rajoy no lo está haciendo, es un líder que no ha solucionado los grandes problemas internos del partido (que siguen existiendo aunque ahora estén callados), cuyo perfil comunicacional es bajo, reactivo, cuando lo habitual estando cerca de unas elecciones así es que hiciera lo contrario. No da ruedas de prensa, a menudo delega asuntos de gran relevancia en Cospedal o González Pons... No es un líder fuerte, no explica sus propuestas porque eso le quemaría, no está internamente afianzado. 

P: Volvamos a las elecciones del 22 de mayo. Camps y otros siete imputados por corrupción vuelven a estar en las listas del PP valenciano. No son los únicos: más de un centenar de implicados en casos de corrupción  se presentan a las elecciones. Sin embargo, las encuestas no parecen  reflejar castigo alguno de los electores por este motivo. ¿Por qué la corrupción no influye en España a la hora de votar?

Albert Medrán | @Maria_valde
R: Yo creo que hay una primera causa cultural, somos un país de raíces católicas cuyo modo de entender la vida propugna el perdón. Cosa que no existe entre los protestantes, donde hay que obrar bien durante toda la vida para ganarse el cielo. Allí no hay segundas oportunidades. Esto es lo que en primera instancia hace que en el mundo latino la exigencia de responsabilidades sea distinta. En segundo lugar, hay que entender también que la sociedad española es como es: la práctica de ciertos comportamientos corruptos y clandestinos está generalizada, si podemos evitar pagar una cosa lo evitamos, intentar quitar el IVA de las facturas, no declarar ciertas cosas... Todos hacemos nuestros trapicheos. Esto en otras sociedades, como las nórdicas, no pasa jamás. Y luego está también el grado de adscripción que tú tienes a un líder, donde los elementos objetivos no sirven de nada para cambiar tu opinión. Lo que importa es la afectividad y la fidelidad que le tienes. No cambias el voto así como así aun sabiendo todo lo que sabes. Y eso es lo que ocurre en muchos casos. El hecho de que la oposición sea débil, como pasa en la Comunidad Valenciana y en muchos municipios, también juega a favor de esto.

P: Barcelona jugará un papel clave en las elecciones. El PSC puede perder por primera vez su alcaldía más emblemática. ¿En qué medida puede afectar este hecho al PSOE a nivel global? 

R: Trias lo tiene muy bien para ser alcalde, nunca CiU lo tuvo mejor. Llevan cuatro años trabajándolo muy bien, él fue el primer candidato que se quedó tras perder unas elecciones... Y luego está la "marea convergente", que hay que entenderla de dos maneras: en primer lugar la ola de cambio y el empuje de la victoria de Mas puede llevar CiU a ganar en muchos sitios donde nunca ganó, incluido Barcelona, y por otro puede ser un arma de doble filo en la capital de Cataluña, cuya base sociológica favorece al PSC y donde precisamente ésa marea puede movilizar al electorado. Las primarias que Hereu le ganó a Tura puede también haber ayudado a esa movilización que el PSC necesita. Aún es una batalla abierta. Y a nivel nacional el PSOE tiene la suerte de en este caso poder jugar la carta de la ambigüedad con el PSC, que cuando interesa es PSOE y cuando no interesa no es PSOE. Eso y que no es el PP quien le gana, sino que es CiU. 

P: Castilla-La Mancha ha sido puesta en la diana del PP para estas elecciones. Su estrategia le ha otorgado una importancia capital a lograr que su secretaria general, María Dolores de Cospedal, venza a Barreda y se convierta en presidenta de esa comunidad. ¿Cree que finalmente lo conseguirá y que esta jugada le saldrá bien?

R: Aquí sí que me la juego y diré que creo que va a ganar el PSOE. Y aquí sí que creo que va a influir la decisión de Zapatero. Barreda fue muy crítico, le movió la silla... creo que le va a funcionar. Además, creo que a Cospedal puede perjudicarle el hecho de la lectura nacional, de ser considerada una candidata poco cercana. Sin embargo, no creo que una derrota aquí vaya a ser treaumática para el PP. Nunca han ganado allí, ni siquiera en 1995, y no ganar esta vez no sería un desastre.

P: Asturias. La irrupción de Álvarez-Cascos parece haber calado y es más que posible que su partido gane las elecciones. ¿Cuál ha sido la clave de su éxito? ¿Puede cundir su ejemplo en otros sitios de cara al futuro o incluso de cara al 2012 con un proyecto nacional?

R: Tras casi 30 años de Comunidades Autónomas, creo que el camino es ése: el poder autonómico tiene que dotarse de movimientos así para sobrevivir y más ahora que su modelo empieza a cuestionarse. Ahora es Asturias, Aragón lo es desde hace años, también Baleares, Cantabria... Creo que la opinión pública ya está madura para que surjan partidos regionalistas que entienden mejor la realidad autonómica y cuya base electoral estaría en la de los dos grandes partidos, de la que se escindiría.

P: Vamos terminando y quería preguntarle por el papel que cree que van a jugar las nuevas tecnologías y el 2.0 en esta campaña, que parece que ya sí empieza a ser relevante, y sobre todo de cara al futuro, a si cree que irá a más hasta ser algo determinante.

R: La situación ahora es que esto ya no se cuestiona. Los partidos y los candidatos ya no se preguntan si estar o no estar. Están. Es un debate superado. Implicación directa en estas elecciones creo que será baja, las dinámicas autonómicas y municipales son suficientemente complejas como para que el resultado vaya a depender si un candidato lo hace muy bien en Twitter o no lo hace muy bien en Twitter. En cuanto al futuro, hay que preguntarse si estamos hablando de abrir canales de difusión de información o de participación para el ciudadano. Si los gobiernos son abiertos estaremos yendo hacia allí, pero si la comunicación es unidireccional, no. 

P: La última: ¿podrán los candidatos tuitear el día de la jornada de reflexión?

R: Mientras no pidan el voto... Mi opinión es que la jornada de reflexión es una gran desaprovechada. Ese día no puedes pedir el voto pero puedes comunicar. Y con esto no me refiero a salir en la tele diciendo "merecemos un Gobierno que no nos mienta", sino a comunicar valores con una acción. Esto es algo que no se hace y que podría aprovecharse.

Una entrevista de @davidmartinezg, realizada con la colaboración imprescindible de @Maria_valde.

lunes, 4 de abril de 2011

Elecciones 2011: Castilla-La Mancha, el órdago de Rajoy

Es el todo o nada al que ha decidido jugar el Partido Popular de Mariano Rajoy ante las elecciones del 22-M. Su apuesta más fuerte, a la que ha vinculado el éxito o el fracaso de su partido en los comicios de mayo. En un momento en el que todas las encuestas le sitúan a más de 10 puntos de ventaja de Zapatero y vaticinan una gran victoria del PP en las municipales y autonómicas, manteniendo el Gobierno de las regiones y ciudades importantes donde ya lo ostenta y arrebatándoselo al PSOE en muchas más, en Génova creen que ha llegado la hora de lanzar el órdago definitivo, el que catapulte (si sale bien) de una vez por todas a Rajoy hacia el Palacio de la Moncloa.